El «Loco» Gatti atajó al coronavirus

Fue hace días uno de los millones de afectados de la pandemia de coronavirus. Y uno de los tantos famosos en riesgo. Por alegría para los futboleros, el inolvidable Hugo Orlando Gatti, para la gente el «Loco», se recuperó de su afección y tras ser dado de alta, contó su mal momento y agradeció a quienes lo apoyaron en España, donde vive hace años.

El arquero, uno de los grandes ídolos de Boca Juniors, narró al diario deportivo As: «El tema era serio, aunque tengo que decir que yo apenas he sufrido porque el coronavirus no me atacó de mala manera como por desgracia le está ocurriendo a otra gente, y sobre todo en Madrid donde está castigando muy fuerte. Yo estaba tramitando mi pasaje para regresar a Argentina con mi mujer, pero lógicamente que al estar ya el virus instalado en España necesitaba hacerme el test para viajar a Buenos Aires con la tranquilidad de haber dado negativo. Mi sorpresa desagradable es que al dar positivo me obligaron a quedarme en el hospital y eso que yo estaba asintomático. Para mí esos primeros días fueron desesperantes».

Y continuó: «Yo tengo de siempre una especie de tos nerviosa, pero que no tiene que ver con mi estado de salud. Fiebre no tuve en ningún momento ni dolor de cabeza. Los médicos me diagnosticaron que tenía una leve neumonía en el pulmón, lo que demuestra que el coronavirus me estaba afectando sin que me diera cuenta».

El «Loco» agradeció la tarea de quienes lo atendieron y de las autoridades del Real Madrid, club con el que simpatiza, desde su presidente, Florentino Pérez, que según él estuvieron pendientes desde el primer momento. «Tengo que esperar quince días más en casa, porque aunque he dado negativo y por eso me han dado el alta, me han dicho que es mejor estar sin moverse de mi apartamento dos semanas más para no correr riesgos. Cuando acabe el estado de alarma tomaré un vuelo con mi mujer y regresaremos a nuestra casa en Argentina. El susto ya ha pasado. Me quedan por ver muchos triunfos de mi amado Real Madrid». Y concluyó con una singular frase: «Como ya le dije hace unos días a Josep Pedrerol (periodista español) desde la cama del hospital: no es tan fácil llevarme para allá arriba. No ha llegado mi momento».

Para quienes no lo conocieron, Gatti fue un sinónimo, un apellido pegado a Boca, donde llegó en 1976 y ganó dos ligas argentinas (Metropolitano y Nacional 76, el de la superfinal con River) y sobre todo, la Copa Libertadores de 1977, donde atajó el penal decisivo en la final ante Cruzeiro, y la Intercontinental ante el Borussia Monchengladbach. Y luego fue parte del histórico equipo que con Diego Maradona obtuvo el Metro 1981. Se retiró en 1988, cuando el técnico José Pastoriza lo sacó de la titularidad luego de su error en el gol de Maciel para deportivo Armenio en la primera fecha.

Posee el récord de mayor cantidad de partidos jugados en Primera División (765) y de penales atajados (26) junto con su colega Ubaldo Fillol, con quien mantuvo una recordada rivalidad que se trasladó a la prensa. Además participó 18 veces con la Selección, en períodos aislados llegando a ser suplente de Antonio  Roma en el Mundial de Inglaterra en 1966. A sus 75 años, tenemos la gracia de que el Loco sigue haciendo su famosa jugada «la de Dios», viviendo en buena forma.

Diego Martín Yamus.
diegoanita@hotmail.com.ar     

@lostribuneros

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