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El ex entrenador de la selección argentina, chilena y hasta del Atlético Mineiro de Brasil, entre otros, volvió a hacer un verdadero papelón de esos que nos tiene acostumbrado; manotazos y el famoso «no me midás» de su colega Ricardo Caruso Lombardi, pero en Francia, luego de que un grupo de hinchas del Niza invanda el terreno de juego intentando atacar a sus futbolistas del Marsella.
La cuestión es que Marsella estaba cayendo por la mínima en su visita al Niza cuando, en el minuto 75, un aficionado le tiró con una botella de plástico al futbolista Dimitri Payet, quien optó por tomarla del piso y revoléarsela a los agresores. Esta actitud dio pie para que los inadaptados ingresen al campo de juego, en un grupo de no más de 20, para pelear con futbolistas del equipo marsellés.
Rápidamente los guardias de seguridad hicieron un cordón, comenzando a separar a los jugadores de los iracundos hinchas. Acto seguido, cuando la situación estaba controlada apareció Jorge Sampaoli para dar la nota. Rodeado de guardias de seguridad y con los rivales lejos, comenzó a gritar y a tirar manotazos al aire sabiendo que no lo ibana dejar ir a pelear con los aficionados.
Esto hizo suspender parcialmente el partido. Una vez aseguradas las garantías para seguir el referí avisó que el encuentro continuaba, sin embargo, Sampaoli decidió que su equipo no entraba al campo de juego. El árbitro decidió dar por terminado el partido por W.O de Marsella.
No es la primera vez que Jorge Sampaoli protagoniza un hecho violento. Vale señalar cuando humilló a un inspector de tránsito en su natal Casilda, o cuando un técnico de la televisión uruguaya se indignó porque le movió un micrófono ambiente, reaccionado violentamente pero cuando vio que el charrúa le hizo frente directamente huyó, insultando a lo lejos.
@lostribuneros
