Las autoridades alemanas habían permitido a 10.000 aficionados mirar el partido contra los brasileños en la Puerta de Brandenburgo, ubicada en la capital Berlín, dado a que estaba pronosticada una tempestad, pero cuando la cosa se puso 5-0 para los germanos, la gente comenzó a acercarse, y acabaron siendo 100.000.
@lostribuneros