No hay mal que dure 12 partidos…

Boca con una Bombonera desierta, debido a una sanción, rompió un maleficio que durante una docena de partidos estuvo sin conocer la victoria. Esta vez, y por la jornada 14, los xeneizes se impusieron por 1-0 sobre Colón de Santa Fe. El «Burrito» Martínez anotó el exclusivo gol. Colón jugó con 10.

Télam. Boca, con la victoria, llegó a 13 puntos, mientras que Colón, que sumó su tercera derrota consecutiva, se quedó con 15 unidades.

El cuarto de hora inicial mostraron a un Boca sólido en defensa, con presión en la mitad de la cancha y algo punzante en ataque.

El conjunto de Bianchi, en ese lapso, no pasó sobresaltos en la última línea y tuvo el gol, a los 12 minutos, en los pies de Sánchez Miño, el futbolista más claro del partido.

Pero luego Boca se desdibujó, no mantuvo su nivel y Colón, con Sebastián Prediger como estándarte, emparejó el desarrollo del juego.

Y hasta tuvo una chance muy clara, sobre la media hora, con un remate de Bruno Uribarri que controló Agustín Orión.

No obstante, en los últimos 15 minutos, se vio lo mejor de Boca: adelantó sus líneas, ajustó su juego, maniató a su rival y contó con dos oportunidades de gol en apenas 60 segundos.

Es que a los 41 minutos Guillermo Fernández sacó un disparo que exigió a Diego Pozo y a los 42m. Juan Manuel Martínez reventó el palo derecho.

Y ese predominio del final del período inicial se extendió en los primeros minutos del segundo tiempo. Es más, a los 4m., Martínez, de cabeza, puso el 1 a 0, tras un centro desde la derecha
de Lautaro Acosta.

Boca, tras el gol, justificó el triunfo, merced al despliegue de Acosta, el juego de Sánchez Miño y la profundidad de Martínez.

Salvo por un cabezazo de Gabriel Graciani que salvó Claudio Pérez a los 9 minutos, Colón casi no llegó al arco de Orión, que siempre dio seguridad.

Y Boca pudo definirlo antes a través de Santiago Silva (12m.), Lisandro Magallán (21m.) y Sánchez Miño (26m. y 30m.), pero fallaron en la estocada final.

Y cuando fue apremiado en el final, apareció la figura de Orión para rechazar sendos cabezazos frontales de Rubén Ramírez y de Maximiliano Caire.

Por eso, el equipo de Bianchi volvió a ganar (segundo triunfo en el torneo, el primero fue en el debut ante Quilmes por 3 a 2), y aunque no hubo público (por los incidentes ante River) los hinchas festejaron.