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Argentina arrancó el Mundial Brasil 2014 con una ajustado triunfo ante la debutante Bosnia Herzegovina en el gran Maracaná, por el Grupo F. Los balcánicos anotaron un gol en contra, mientras que Messi se mandó un verdadero golazo.
La celeste y blanca no anduvo bien en un Maracaná repleto de punta a punta y apenas venció a un seleccionado bosnio que debuta en un mundial de fútbol.
Argentina presentó serios problemas defensivos, fue mezquino en el ataque no pudiendo conectar, como todos esperábamos, a los habilidosos Dí María, Agüero, Maxi Rodríguez y Messi, sin embargo, la «Pulga» logró despegarse y anotar un muy buen gol.
El partido en líneas generales fue para el bostezo, ya que Argentina llegó a la primera conquista producto de un gol en contra del defensor Kolasinac a los 2′. Los europeos tuvieron el porte del balón durante todo el primer tiempo.
Sergio Romero tuvo una de cal y otra de arena; el arquero argentino sacó lo que era un gol cantado del equipo balcánico, pero cuando el juego estaba cercano al final, se «comió» el descuento, anotado por Ivisebic (84′).
Al comenzar el segundo tiempo Campagnaro fue reemplazado por Gago y Maxi Rodríguez dejó el campo en lugar de Higuaín, por eso, el equipo argentino logró recuperar la pelota y ser algo más potente en la faz ofensiva.
No pasaba nada, hasta que pasó, Messi tomó un balón, comenzó a despegar de la férrea marcación de los bosnios y sacó un remate que acabó en el fondo de las piolas.
Argentina se mostró conforme con el resultado, era mezquina y carente de ambición, mientras que Bosnia era parco, tenía jugadores que se enredaban con la pelota y eran incapaces de dar dos pases certeros, aún así, lograron descontar.
La cuestión es que Argentina no decepcionó y logró lo más importante: el triunfo. Ahora, Sabella tiene tiempo para poder modificar su esquema y buscarle la vuelta al próximo rival que será la débil Irán en el Mineirâo.
@lostribuneros
