Que la desorganización del fútbol argentino es moneda corriente es harto conocido y nos harta. Entre tantos desatinos, cambios de formatos, de fechas, de horarios, acomodos por doquier. Hoy se acepta como normal un partido a las cuatro de la tarde de un lunes. Pero en aquel otoño de 1994, jugar a las tres de la tarde de un martes …
Read More »