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Los cafeteros lograron un histórico triunfo en el Maracaná al derrotar por 2-0 a Uruguay y lograr, por primera vez, la clasificación a los cuartos de final del Mundial. Brasil será su rival.
Un partidazo jugaron los cafeteros en el gran Maracaná y dieron por terminada la pesadilla brasileña del “Maracanazo” al superar a los orientales, con justicia, por 2-0.
Colombia se paró en el campo con autoridad, luchando cada pelota, trabajando bien en conjunto, y sabiendo desarmar a los atacantes charrúas. El juego arrancó friccionado, con Colombia tratando de manejar la pelota y Uruguay queriendo salir de contra, hasta que James Rodríguez recibió una pelota, la acomodó con el pecho y sacó un zapatazo que se le incrustó al arquero Fernando Muslera.
El golazo de Rodríguez fue espectacular; a los 28’ el cafetero se ponía en ventaja y, por primera vez en el partido, logró enervar a un Uruguay que había entrado al campo contrariado por cuestiones extrafutbolísticas, pero que no se rindió, al contrario, atacó, y buscó la manera de llegar al arco defendido por Ospina, solo que les faltaba Luisito Suárez para darles moral.
Diego Forlán estuvo muy bajo, trató de rematar una vez, como en los viejos tiempos, pero patinó y la pelota se fue lejos.
Para el complemento, Tabárez cambió el esquema táctico y adelantó en la cancha al equipo Celeste, que precisaba empatar, pero el cafetero fue astuto, y antes que los charrúas reaccionen, pusieron el 2-0 gracias nuevo ídolo James Rodríguez.
El segundo gol, a los 5’ del complemento, desmoralizó a un Uruguay que dejó de jugar como equipo, grave error, y a los ponchazos fue por el descuento.
Oscar Tabárez movió el banco, y recién Uruguay pudo ponerse frente al área colombiana, cuando salió Forlán y el “Cebolla” Rodríguez pudo pararse mejor en el campo.
Ospina, el arquero de Colombia, fue un pulpo, porque sacó pelotas de gol, evitando que los uruguayos descuenten, porque si a los celestes les dejás meter uno, te meten diez.
Colombia terminó defendiendo, pero saliendo de contra, hubo varias faltas duras de ambas partes; Pékerman fue brillante a la hora de parar a su equipo, que estuvo muy bien en cada punto del campo.
Los cafeteros jugarán ante Brasil el próximo viernes 4 de julio en Fortaleza a las 17:00 horas de Buenos Aires.
@lostribuneros
