En el final del primer tiempo entre Francia y Alemania, por los cuartos de final del Mundial, en el Maracaná hubo escenas de violencia en una tribuna. Un gripo de hinchas franceses permanecía de pie sobre sus asientos, impidiendo que los demás aficionados puedan ver el juego cómodamente. Los guardias de seguridad intentaron calmarlos, pero la banda iracunda comenzó a provocarlos, por lo que tuvo que intervenir la policía.
Un hincha, iracundo, intentó agredir un funcionario policial y todo terminó en un disturbio que acabó con varios franceses detenidos.
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