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Esam El Hadary sigue escribiendo una increíble y fabulosa historia. El arquero egipcio de 44 años, cumplidos el 15 de enero, fue clave hoy en la definición por penales que le dio a los Faraones el pase a la final de la Copa Africana de Naciones sobre Burkina Faso, gracias a sus dos atajadas.
El partido había terminado 1-1 en 120 minutos de juego en el Stade d´Angondjé de Libreville, y en la serie de remates desde 11 metros, El Said comenzó errando para Egipto. Luego todos acertaron y con el marcador 3-3 y un penal menos, el arquero burkinés Kouakou Koffi buscó el gol, pero El Hadary se lo negó. Amr Warda puso arriba a los rojos y le tocó a Bertrand Traoré, el delantero del Ajax de Holanda. Pero El Hadary volvió a lucirse y salvó el tiro para dejar la tanda a favor de su país y poner al equipo de Héctor Cúper en su novena final africana, todo luego de su larga ausencia en las últimas tres ediciones. Como otras leyendas egipcias, Ahmed Hassan, Hossam Hassan, los hermanos Ramzy, Taher Abou Zeid, Mahmoud Al Khatib o el mismo Mahmoud El Gohary, técnico en su último Mundial en Italia 1990, Esam El Hadary es un mito viviente. Y si corona todo con el título de la CAN el domingo ante el ganador de Camerún y Ghana, será el moderno rey de Egipto.
Diego Martín Yamus.
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