Si existió un hombre emblemático en el mundo del fútbol, ese fue el doctor Tabaré Vázquez, presidente mandato cumplido del vecino Uruguay, que dejó de existir en la víspera de este 6 de diciembre.
Tabaré, como lo llamaban en su propio país, se destacó, además, por haber sido presidente del club Progreso, institución que logró una inédita clasificación a la Copa Libertadores de América en 1987, la mayor goleada de la historia del fútbol profesional contra Nacional, ese mismo año por 6-1, y lo mejor: Campeones del Uruguayo de 1989.
La sensibilidad de este médico oncólogo, hombre oriundo del populoso barrio La Teja, ubicado al oeste de la ciudad de Montevideo, lo llevó a crear un comedor en la propia institución que él presidía.
Dada su gran gestión como pope de «Los Gauchos del Pantanoso», lo tentaron para el lado de la política como intendente (Jefe de Gobierno o Alcalde) de Montevideo, donde ganó ese mismo año de 1989 sin problemas.
El 15 de febrero de 1990 el flamante intendente asumía en su cargo el mismo día que su Progreso eliminaba a Peñarol de la Copa Libertadores en un estadio Centenario que, curiosamante tuvo a la barra del popular club aurinegro coreando, pese a la dolorosa derrota: «Y ya lo vé, y la lo vé, el intendente es Tabaré».
Vázquez, nacido en 1940, se transformó en el primer Intendente de izquierda de Montevideo, y luego, en 2004 en el primer Presidente de izquierda de Uruguay.
Fue presidente de los charrúas en dos períodos, su último fue justamente en este 2020, cuando el 1 de marzo le entregó la banda presidencial a su opositor Luis Lacalle Pou.
Por esta causa el superclásico entre Peñarol y Nacional debió ser postergado por tratarse de un presidente mandato cumplido.
@lostribuneros