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El Mundial Sub 20 de Malasia, entre junio y julio de 1997, no sólo queda en la historia por el bicampeonato de la Argentina de Pekerman o porque fue el primero con 24 países. Uno de ellos fue Brasil, que marcó un récord que será casi imposible de superar: 20 goles en dos partidos, o mejor, dos triunfos seguidos marcando 10 goles.
La curiosidad empezó a gestarse en el arranque de aquel Grupo B en Kuching, que la canarinha compartía con la Francia de Henry y Trezeguet. Goleó a los Bleuets 3 a 0 y batió a Sudáfrica 2 a 0, donde el delantero Adailton se destacó con tres tantos. Pero el primer impacto numérico del equipo de Toninho Barroso fue el 22 de junio, cuando arrasó a Corea del Sur 10 a 3, con un primer tiempo 6-0 y nada menos que media docena de Adailton, de los cuales cuatro en nueve minutos. Dos dobletes de Fernandao y Zé Elías completaron la locura para obviamente ganar la zona y enfrentar a Bélgica en octavos de final.
Brasil había vapuleado a los belgas un año antes, en el Torneo Esperanzas de Toulon en Francia, por 7 a 0. Y ese 25 en Kuching lo hizo mejor: 10 a 0. Alvaro con dos goles abrió el marcador, y luego llegaron los demás, esta vez más repartidos: Eder, Alex 3, Roni 2, Adailton uno solo y Zé Elías, muchos con complicidad del arquero Gillet y sus defensores. Canal 13 de Buenos Aires hizo un video mostrando la cara del golero en los diez tantos.
De poco le sirvieron a la verdeamarilla dos goleadas así y 25 conquistas en cuatro partidos. El 29 en los cuartos de final, perdió 0-2 con Argentina el clásico y quedó afuera, y más tarde, dos futbolistas se pelearon en la concentración, donde uno le reprochó al otro su falta de compromiso. Pese a eso, el récord permanece en las grandes memorias del fútbol.
Goleada a Bélgica:
Diego Martín Yamus.
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