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El uruguayo Luis Suárez dejó de marcar goles en el Liverpool pero el notable atacante charrúa se dedica a estar espirtualmente, es decir, es el fabricante de los goles. Liverpool le ganó sacando chispas por 4-3 al Swansea City por la fecha 27 de la Premier con tres goles nacidos de las piernas del oriental.
Liverpool quiere ser campeón pero para ganar una Premier League hay que disminuir la cantidad de errores y sumar de a tres porque Arsenal, Chelsea y Manchester City no perdonan.
Los Rojos cometieron varias tonterías en el fondo y otra cantidad importante de genialidades en el ataque, por eso, el juego terminó con 7 goles anotados por los bandos, en un Anfield Stadium que terminó con muchos hinchas con taquicardia.
Swansea City entró a destrozar al equipo inglés, pero los escarlatas tenían que vencer a los del vecino país de Gales para que no se les escapen los punteros.
Sturridge apenas a los 3′ ponía la apertura en el marcador y Henderson anotaba a los 20′ el segundo desde la media luna, clavándola en un ángulo, lo que daba la sensación que este juego iba a ser muy sencillo para los locales, pero ¡que nada!, los galeses se enchufaron en la ofensiva, aprovecharon que la defensa anfitriona es mala, desordenada, displicente, y a los 23′ anotaron un gol similar al de Henderson.
Solo 3′ minutos después, un grosero error de la defensa escarlata terminó con el empate de Bony, tras un centro frontal de Guzmán, y se ponían 2-2.
Liverpool no renunciaba al juego aguerrido en el ataque, triangulaban, rotaban, corrían la pelota de un sector al otro, y sorprendían; el uruguayo Suárez la recibió en lateral del área grande, ingresó con total serenidad y le colocó la pelota en la cabeza a Sturridge para que este, a los 36′, anote el 3-2.
El partido se jugaba a 10.000 RPM y nadie quería perder.
En el complemento, hubo un penal absurdo en favor de Swansea que Bony no perdonó y coronó el 3-3 parcial.
Liverpool luchaba a brazo partido y sitió a su adversario frente a su campo, hasta que el jugador Luis Suárez hizo de las suyas; el oriental tomó el balón fuera del área, sacó un latigazo que se desvió en un defensor, el aquero cedió rebote y, tras luchar, Henderson ponía el 4-3 que resultó definitivo.
Cerca del final Gerrard estrelló un balón en un poste y un minuto después tuvo otra chance que se fue por poco.
Swansea jugaba de contragolpe y ponía en jaque a sus rivales, por eso, los tres goles anotados, aunque mereció alguno más.
El partido en líneas generales fue: excelente.
Liverpool suma 56 puntos y está apenas a 4 del puntero Chelsea.
@lostribuneros
