Falcioni, momento de dolor profundo mezclado con la algarabía de la clasificación

El entrenador de Independiente, Julio César Falcioni, está comiendo pan que el diablo amasó. Tras de venir luchando contra el cáncer, el entrenador días atrás sufrió el dolor de perder a su esposa.

Al llegar a La Plata, el «Pelusa» fue el primero en bajar de ómnibus que los transportó y allí y fue directamente a la cancha del estadio donde estaba esperándolo su colega entrenador Ricardo «Ruso» Zielinski, que tiene a cargo a Estudiantes. Ambos se dieron un apretado abrazo lleno de lárgrimas.

Acto seguido el Rojo se lleva la victoria desde los penales, eliminado al Pincharrata, entrando en las semifinales.

La mezcla de euforia y dolor hizo emocionar a Falcioni, que mirando al cielo apuntó con su dedo índice, dedicándole la victoria a su fallecida mujer Ada Palka.

@lostribuneros

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