La camiseta que Diego Maradona utilizó en aquel histórico partido ante Inglaterra por el Mundial de México 1986, fue subastada y adquirida por un emiratí que pagó 9 millones de dólares. Este hecho generó la reacción de arquero que padeció al Diego ese fatídico día para el fútbol inglés; Peter Shilton atacó nuevamente al Diez:
“No hubiera cambiado (camisetas) con Maradona ni por todo el té en China por lo que sucedió ese día. Ni siquiera lo usaría en la casa, ni siquiera para lavar los platos en mi bungalow”, disparó el cuidapalos.
Tras los dichos de Shilton el Chiqui Tapia, presidente de AFA, con altura lamentó no haber podido llegar a la oferta final para “poder traerla a nuestra casa, la más emblemática de nuestra selección argentina”.