Cristiano Ronaldo y Neymar entre espejismos, fantasías y mentiras

Con la billetera llena de petrodólares y el ego más inflado que un globo aerostático, Cristiano Ronaldo salió a decir que la liga de Arabia Saudita es mejor que la francesa. Entre dunas, camellos y un calor que te cocina los sesos, el portugués intenta convencer al mundo de que patear una pelota en el desierto tiene más nivel que jugar en Europa, mientras Neymar asiente desde la camilla de kinesiología.


Cristiano Ronaldo encendió la mecha en los Globe Soccer Awards al asegurar que la Saudi Pro League ya superó en competitividad a la Ligue 1 de Francia. Según el luso, en el país de la Torre Eiffel «solo existe el PSG», mientras que en el desierto el nivel es una maravilla, ignorando quizás que el clima de 40°C es ideal para un golpe de calor pero no para el fútbol de élite.

Neymar, que de vacaciones sabe un montón, no tardó en darle la derecha al Bicho por CNN afirmando que «hoy la liga saudí está por encima». Es tierno escucharlo, considerando que en Francia metió 118 goles en 173 partidos, mientras que en Al-Hilal jugó apenas 7 encuentros y se rompió todo antes de que pudiéramos aprender cómo se dice «fractura» en árabe.

«La liga saudí no es inferior a la francesa, allá hay dos o tres equipos con buen nivel y acá es más competitivo», disparó CR7 con una caradurez que asusta. La respuesta desde Francia no tardó en llegar: la cuenta oficial de la Ligue 1 le clavó una foto de Messi levantando la Copa del Mundo con el texto «Leo jugando a 38 grados», cerrándole el pico con elegancia mundialista.

Adil Rami, ex campeón del mundo, fue menos diplomático y directamente dijo que Cristiano «dice mierdas» y que en la Ligue 1 «se lo comen crudo». Es que los números no mienten: Neymar huyó de Arabia en 2025 tras rescindir un contrato donde cobró millones por mirar los partidos desde la tribuna, demostrando que la «magia» no sobrevive a la arena.

A pesar de los intentos de marketing de estos dos veteranos, la realidad es que el fútbol francés sigue nutriendo a las mejores selecciones mientras ellos se jubilan en una liga de exhibición. Cristiano puede repetir su discurso mil veces, pero ni todo el oro de los jeques puede comprar la mística de un fútbol que no se juega por compromiso comercial.


ACTUALIDAD Y POSICIONES

Tras estas declaraciones que rozan el ridículo, la Ligue 1 sigue exportando talentos y compitiendo en lo más alto de Europa, mientras que la Saudi Pro League espera que alguna otra estrella quiera ir a cobrar la jubilación anticipada. En la tabla de la coherencia, Francia sigue puntera por goleada, dejando a los jeques y sus amigos en zona de descenso intelectual.