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La participación de Cabo Verde, una isla casi perdida en el Atlántico, en la Copa Africana de Naciones, le trajo más de un dolor de cabeza al Gobierno, quien financió con dinero público su estadía en Sudáfrica. La oposición se los quiso «comer» pero los Tiburones Azules no decepcionaron.
Cabo Verde, como dijimos antes, es una isla casi perdida en el océano Atlántico, ubicada frente a las costa del continente africano. Tiene apenas 500.000 habitantes, hablan en portugués y su territorio es apto para cultivo de alimentos pero las sequías y las inundaciones le han arruinado la existencia. Por eso, los nuevos gobiernos apuestan al turismo, un sector que les permite llevar una vida mejor y más digna, ya que tienen que importar casi todo.
A partir de una decisión tomada por le Presidente Dr. Jorge Carlos Fonseca, la oposición se lo quiso «devorar»; el máximo dirigente político de la isla financió la participación del equipo nacional en la Copa Africana de Naciones, con dinero público.
Las arcas de la Federación Caboverdense de Fútbol estaban casi vacías, y tenían una oportunidad histórica, ya que los Tiburones Azules jamás habían llegado tan lejos en el fútbol internacional. Los directivos de la federación habían podido conseguir apenas el 20% del presupuesto necesario para viajar y participar de la CAN (Copa Africana de Naciones) pero restaba el 80%.
La idea del presidente la federación era la de no presentarse y, así, cederle el lugar a otro país para que participe. El Presidente de la República aportó el dinero y ahí los vemos haciendo historia.
La oposición, en primera instancia, protestó airadamente, ya que, según ellos, el país presenta demasiadas dificultades como para financiar a un equipo de fútbol, pero el jurista de 62 años de edad no les hizo caso y argumentó que la participación del equipo en un campeonato de esta índole los haría aparecer en el mapa, dando a conocer el país en el resto del continente y en el mundo.
Al parecer, el Dr. Fonseca no se equivocó; los muchachos lograron una histórica clasificación a cuartos de final, y además de estar entre los mejores de África. Esta clasificación abre la puerta para que todos, en diversos puntos del planeta, hablemos de ellos, y se promueva así la mayor fuente de ingresos de la isla: el turismo.
A esta altura ya ni les importa si van a salir campeones o no, el tema es que el mundo conozca las virtudes de una isla casi ignorada y parece que al Presidente de la República la apuesta le salió redondita.
@lostribuneros
