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Botafogo no tuvo mayores problemas para superar por 4-0 en el Maracaná al Deportivo Quito en una noche magnífica Wallyson que marcó un triplete. Los cariocase se ganaron el pasaje a la fase de grupos de la Copa Libertadores.
El “Fogâo” tenía que revertir el 1-0 sufrido hace una semana en la capital de Ecuador y con un Maracaná repleto tenía la obligación de vencer por más de dos goles para continuar.
El juego comenzó con una falta fea a los 14 segundos sobre Estupiñán, el hombre gol del Quito, casi como una señal que indicaba que los jugadores cariocas estaban dispuestos a ganar sea como sea.
Deportivo Quito, un equipo muy limitado, fue a especular con el resultado y, en especial, con el gol de visitante, ya que si lograban anotar desmoralizarían a los anfitriones. El público que colmó las graderías del Maracaná no paraba de empujar a su equipo que era presa de los nervios.
Botafogo iba al frente pero se encontraba con una defensa férrea, bien parada, Quito salía de contra y encontraba a una defensa albinegra abierta pero firme.
Hubo pierna firme y bastantes jugadas que merecieron la expulsión directa de más de un elemento, especialmente en el Glorioso, solo que el árbitro Silvio Trucco pareció haberse olvidado en Buenos Aires de cargar algo de “carácter” y dejó pegar a diestra y siniestra.
El equipo de la estrella peleaba y presionaba dentro del área ecuatoriana, gran error del mediocampo visitante, por eso, Wallyson a los 37’ le pegó con furia al balón y lo mandó al fondo de las piolas, colocando el 1-0 que los serenaba un poco.
Quito todavía estaba a un gol de hacer estragos, el Glorioso no podía bajar los brazos, por eso tenía que seguir aumentando.
Los ecuatorianos tenían un punto fuerte llamado Estupiñán, autor del gol en la ida, pero los brasileños, sabedores de las cualidades del moreno atacante, lo lesionaron de gravedad; Edilson a los 50’ de juego le cometió una grosera plancha al atacante en las narices del referí argentino que apenas lo amonestó. Esa jugada era para roja directa porque terminó con el jugador lesionado y reemplazado.
Herido en su orgullo y viendo que el árbitro era discreto, los jugadores del Quito se dedicaron a devolvérsela a los dueños de casa.
El 2-0 no llegaba, Botafogo no reaccionaba, tuvo un bache pero el técnico Eduardo Hungaro metió mano en su equipo que cambió el partido.
Lodeiro quedó muy cómodo en su posición en la cancha, luego de las modificaciones de su entrenador y pudo tirarle una pelota Wallyson que anotó el 2-0 y la clasificación estaba casi a mano porque un gol de Quito podría tirarles todo por tierra.
Quito estaba entregado, no llegaba al arco rival, lograba si iniciar los contragolpes pero no había alguien capaz de atravesar el campo y conectar con el ataque. Botafogo tuvo su oportunidad nuevamente, Elías habilitó a Wallyson y éste ponía el 3-0 que lapidaba a los ecuatorianos, su triplete.
La cosa ya estaba liquidada, el pescado estaba vendido, pero Henrique puso el 4-0 a los 90’+1 aprovechando una “dormida” de la defensa.
Botafogo jugará en el Grupo 2 junto a San Lorenzo, Independiente del Valle de Ecuador y Unión Española de Chile.
@lostribuneros
