GLASGOW, ESCOCIA— El Old Firm de este fin de semana, el clásico escocés entre Rangers y Celtic, terminó en un decepcionante empate 0-0 que no hizo más que profundizar una crisis que ya venía de los rotundos fracasos europeos de ambos clubes. La falta de espectáculo y el mal rendimiento de los dos gigantes de Glasgow han colmado la paciencia de los aficionados, quienes exigen cambios urgentes.
Fracaso en Europa y sequía de goles
Tanto Rangers como Celtic han sufrido una de sus peores campañas europeas recientes. El Rangers fue humillado en la fase de clasificación de la Champions League tras una contundente derrota 6-0 ante el Club Brugge, quedando eliminados con un global de 9-1. Este resultado es el peor desde la temporada 1959/60. Por su parte, el Celtic también fue eliminado de forma sorpresiva por el modesto Kairat Almaty.
En el ámbito local, la situación no mejora. El empate sin goles entre ambos equipos en el clásico es reflejo de una profunda crisis ofensiva. El Rangers acumula su cuarto empate consecutivo en la liga, con apenas tres goles anotados en toda la temporada. El Celtic no se queda atrás, ya que tampoco ha logrado convertir en tres de sus últimos cuatro partidos.
La presión sobre los entrenadores es máxima
La frustración de los hinchas se hizo evidente en el estadio, con pancartas que rezaban “Enough is enough” («Ya es suficiente»). El técnico del Rangers, Russell Martin, es el más señalado. El periodista y exjugador Kris Boyd lo ha calificado como un “dead man walking” (un hombre que va de salida), sugiriendo que su puesto pende de un hilo. El entrenador del Celtic, Brendan Rodgers, tampoco está exento de críticas y ambos enfrentan un fuerte escrutinio por su gestión, estilo de juego y las decisiones en el mercado de fichajes.
El bajo rendimiento de los dos clubes más importantes del país no solo afecta su imagen, sino que tiene graves consecuencias para el fútbol escocés en general. Las recientes eliminaciones europeas han dañado el coeficiente UEFA de Escocia, lo que podría poner en riesgo las plazas del país en futuras competiciones internacionales.