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El volante de Huracán que sufriera la pérdida de las falanges de tres dedos en el accidente vial de febrero en Venezuela, volvió jugar al fútbol; entre lágrimas y ovación abandonó el campo de juego.
Patricio Toranzo la pasó muy mal tras el recordado accidente que sufriera junto al resto de la delegación quemera en Caracas. Mucho se especuló. Lo cierto es que tras mucho esfuerzo y largas horas de rehabilitación y más, el futbolista volvió a su gran amor: el fútbol.
El volante, que perdió tres falanges de sus dedos, ingresó a los 33 minutos del complemento para encarar el juego ante Unión de Santa Fe, en el Tomás Ducó, por la jornada 15 del Torneo Transición.
1 a 1 terminaron pero esto pasó a segundo plano; el “Pato” se robó la ovación de su hinchada y todos los flashes.
“Perdón por la emoción; fue muy fuerte lo que pasé”, arrancó diciendo entre lágrimas tras el pitazo final. “Siempre confié en mí y en los médicos”.
No olvidó a su compañero Diego Mendoza que, si bien su lesión fue de otro tipo, aún se está recuperando; “Le mando un saludo a Diego, quería volver con él”, cerró ante el coreo de su nombre por parte de la hinchada quemera.
@lostribuneros
