Tribunero.com Portal futbolero
Una atmósfera cargada de tensión y violencia empañó el encuentro entre Cerro Porteño y 2 de Mayo en el Estadio Defensores del Chaco, dejando en evidencia las oscuras facetas que a veces se esconden detrás del fervor futbolístico. Dos facciones de la hinchada del popular equipo «Ciclón de Barrio Obrero» desataron el caos en la popular, desencadenando un bochornoso episodio que obligó a la suspensión del encuentro.
El arquero del equipo cerrista, en un acto desesperado por calmar los ánimos, optó por utilizar una manguera y rociar con agua fría a los enfurecidos barras. Sin embargo, esta medida no logró contener la situación, y apenas diez minutos después de iniciada la complementaria, el árbitro se vio obligado a detener el partido.
En medio del caos, el entrenador de Cerro, Víctor Bernay, expresó en una conferencia de prensa al día siguiente en el estadio La Nueva Olla: «El partido lo queríamos jugar. Esto no es solamente algo deportivo, es un problema social». Sus palabras reflejan la gravedad de la situación y la necesidad de abordar las raíces profundas de la violencia en el fútbol.
Medios paraguayos han especulado sobre posibles vínculos entre los incidentes en la popular y grupos relacionados con la venta de drogas, subrayando la complejidad de la situación y la urgencia de tomar medidas efectivas para erradicar la violencia de los estadios.
En medio de la turbulencia, los futbolistas se vieron en la necesidad de brindar contención en el campo de juego a los niños que fueron evacuados debido a la situación caótica. Una imagen conmovedora fue protagonizada por el jugador Luis Riveros, quien recibió en sus brazos a un niño de apenas dos años mientras sus padres eran evacuados, mostrando así la solidaridad y humanidad en medio de la adversidad.
El club Cerro Porteño ha repudiado enérgicamente los hechos y ha anunciado medidas drásticas para evitar futuros incidentes, incluyendo la prohibición de guardar elementos como banderas y bombos en las instalaciones del club, así como la adopción de medidas disciplinarias contra los responsables y participantes de este vergonzoso episodio.
