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En la ciudad de Asunción, todos esperaban un emocionante partido, y así fue. El Olimpia, después de su derrota por 2-0 en la visita al Fluminense, se enfrentaba a la difícil tarea de remontar. La historia nos recordaba que el Decano tenía la capacidad de revertir situaciones ante este rival. Este enfrentamiento en los cuartos de final de la Copa Libertadores brindó emociones de principio a fin y terminó con una victoria para el «Flu» con dos asombrosos goles al final del partido.
Desde el pitido inicial, el Olimpia se lanzó al ataque con nerviosismo y ansiedad, bajo la presión de una multitud que llenó el estadio Defensores del Chaco. Sabían que necesitaban anotar dos goles para forzar los penales y tres para llegar a las semifinales. Por otro lado, el equipo brasileño adoptó una estrategia de defensa sólida, cerrando espacios y confiando en su arquero, Fábio, como su figura clave. Felipe Melo, el motor de la defensa, fue fundamental hasta que una lesión lo obligó a abandonar el campo en la segunda mitad.
Mientras tanto, en el lado brasileño, el veloz John Kennedy, ubicado en el centro del campo entre los defensores paraguayos, aprovechó un largo pase para desencadenar una espectacular carrera hacia el arco de Juan Espíndola. Allí, disparó un golazo imparable que dejó al portero simplemente viendo cómo la pelota se colaba en la red. Este gol llegó en el minuto 24 y puso al «Fluzao» en ventaja por 1-0.
Este gol enardeció aún más a los paraguayos, que con ansias y determinación buscaron desesperadamente el empate antes del descanso. Un minuto antes de la pausa, el argentino Facundo Zabala logró el gol del empate, desatando la alegría entre la multitud en «Puerto Sajonia».
El empate trajo cierto alivio al equipo brasileño, aunque el implacable reloj seguía avanzando hacia los 90 minutos. Durante este tiempo, vimos expulsiones, como la de Fernando Cardozo, que dejó al Olimpia con diez jugadores en el campo. A pesar de tener una desventaja numérica, los paraguayos continuaron buscando sin éxito el 2-1 que les daría esperanzas de un 3-1 y llevaría el partido a los penales.
Sin embargo, esta esperanza resultó ser una fantasía, ya que a falta de diez minutos para el final, el argentino Germán Cano marcó el 1-2 para el Fluminense. Con un Olimpia desconcertado, Cano aprovechó el tiempo de descuento para anotar un golazo más y sellar el encuentro con un marcador de 1-3. El resultado global fue de 1-5 a favor del Fluminense.
Así, la Copa Libertadores tiene a sus semifinalistas: Boca Juniors, Palmeiras, Fluminense e Internacional, y nos espera una emocionante etapa por delante.
