Con la expansión del Mundial a 48 países, es probable que aparezcan algunos inéditos y que el común hincha poco escuchó nombrar. Uno de ellos es Uzbekistán, una de las ex repúblicas de la Unión Soviética que este jueves arribó a la Copa al empatar a cero en Emiratos Árabes Unidos, concretando lo que tanto insinuó estos años y confirmando su fortaleza entre los de Asia, la que recién ahora es recompensada.
Para empezar a escribir de la “tierra de los uzbecos” (tal el significado de su nombre) hay que contar del propio lugar. Situado en el centro del continente, rodeado de Afganistán y otras ex naciones soviéticas, ocupa unos 448.000 kilómetros cuadrados donde viven más de 37 millones de personas, con epicentro en su capital Tashkent.Es junto a Liechtenstein otra nación sin salida al mar y que formó parte de la poderosa Unión desde 1924 hasta su independencia el 1 de septiembre de 1991. Y aunque es una región joven, su fútbol tiene historia y jerarquía entre las de la ex URSS que juegan en Asia.
Desde que en 1992 arrancó su trayectoria con un 2-2 ante Tayikistán por la Copa de Asia Central, ha estado siempre a la sombra de los grandes del continente pero protagonista. A poco de ese comienzo obtuvo los Juegos regionales 1994 al batir a China, y en 1996 alcanzó su primera Copa Asia. Enseguida tomó parte en las eliminatorias para Francia 1998,y si bien no llegó, mostró poder ofensivo y destacados nombres como Djeparov o Shatskikh.
Fue subiendo de nivel y en 2004 quedó a tiro de las semifinales, derrotado por tiros desde el punto penal por Bahrein. Contra los árabes hizo su encuentro más recordado, la repesca para Alemania 2006 donde ganó la ida 1-0 pero la FIFA anuló su triunfo, por un grosero fallo arbitral (ver aparte) y al repetir el partido fue eliminado. En la Asian Cup 2011 reafirmó su calidad arribando al cuarto lugar, su mejor tarea hasta hoy. Y de nuevo estuvo cerca de cruzar la frontera al Mundial en 2014 y 2018. Hasta que una campaña sólida lo depositó en el próximo, primero siendo segundo de Irán en el Grupo E de la ronda 2 y luego escoltándolos en histórica carrera en la decisiva tercera fase, en la que batió a Emiratos Árabes Unidos, tuvo al borde al propio iraní de visita (2-2) y sólo cayó una vez, un ajustado 2-3 ante Qatar afuera.
Un equipo con alto promedio de edad cuenta con Eldor Shomurodov como destacado, delantero de 29 años que es parte de la Roma; el resto juega en la liga local, sobre todo el arrasador Pakhtakor, y unos pocos en otros lugares del continente como Arabia Saudita, China o Qatar. Su entrenador, el “Tigre” Timur Kapadze, fue ex internacional con la selección, apodada “los Lobos Blancos” y que alguna vez contó con el gran Héctor Cúper de técnico, entre 2018 y 2019. Uzbekistán, que sí participó en varios Mundiales juveniles, ahora lo hará donde le corresponde: en el grande.
Diego Martín Yamus. diegoperiodista93@gmail.com.