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Óscar Washington Tabárez, ese maestro de primaria que llegó a lo más alto del fútbol uruguayo como entrenador fue despedido de su cargo al mando de la selección celeste, luego de 15 años, excelentes figuraciones en los mundiales y un récord Guinness.
Al Maestro con cariño; Tabárez puso al fútbol uruguayo en lo más alto del mundo luego de dejarlo cuarto en el Mundial de Sudáfrica 2010 y quinto en Rusia 2018; campeón de la Copa América 2011, pero de mala performance en estas eliminatorias rumbo a Qatar 2022.
La Celeste no andaba bien, es cierto, pero las chances seguían intactas debido a que es todo muy parejo, no habiendo grandes distancias ante el tercero y el quinto que se lleva media plaza.
Duramente criticado por la prensa, con un Juan Ramón Carrasco, entrenador mediocre si los hay pero con mucho poder mediático por ser, justamente, amigo del poder, el Maestro debió dar el paso al costado luego de tanta presión.
Tabárez puso a Uruguay nuevamente en el tapete internacional gracias a una excelente planificación y modernización del estilo de juego dejando atrás décadas sin clasificar a una copa del mundo. Su estilo, por fin, tiró por tierra el estigma que decía que los uruguayos jugaban al fútbol en carreta mientras que el mundo moderno lo hacía en fórmula uno.
Más de un centenar de futbolistas tuvieron oportunidad con este técnico quien, además, puso de rodillas a Italia e Inglaterra en Brasil 2014, al vencerlas por 1-0 y 2-1 respectivamente, volviendo al viejo dicho que reza «cuando juega la Celeste todo el mundo boca abajo».
Vale señalar que además de jerarquizar a la selección oriental, Tabárez hizo lo mismo con las juveniles, incluso tanto a nivel Sub 20 como en Sub 17 llegaron a jugar finales del mundial como sucedió en 2013 cuando perdieron por penales con Francia, donde jugaba Pogbá, y en 2011 fueron los menores de 17 años que cayeron en el Azteca ante la selección mexicana por 2-0.
No le dieron la chance, al menos, de que se despida eliminado o bien pueda revertir la situación logrando la clasificación así fuese mediante Repechaje, algo que no asombraría a nadie ya que a la mayoría de los mundiales fueron de esa válida manera.
