Buenos Aires, Argentina. La derrota 4-1 de Racing ante Argentinos Juniors no fue un simple tropiezo, sino un golpe más en la profunda crisis que atraviesa el club. El equipo de Gustavo Costas sufrió una goleada que no solo lo dejó en la parte baja de la tabla, sino que también encendió la furia de los hinchas y puso en jaque la continuidad de su entrenador.
La Academia comenzó con la ilusión de un gol tempranero de Tomás Conechny, pero la alegría duró apenas tres minutos. Argentinos reaccionó rápido y, con goles de Alan Lescano, Hernán López Muñoz, Matías Giménez y Nicolás Oroz, selló una victoria contundente que dejó en evidencia las falencias defensivas y la falta de solidez de un Racing desorientado.
Un equipo sin respuestas y una hinchada furiosa
El resultado y el rendimiento del equipo desataron el enojo de los hinchas. Las redes sociales se llenaron de mensajes de frustración, y el propio Conechny fue uno de los principales señalados por la afición. El malestar es palpable y se ha extendido más allá de las plataformas digitales, con protestas que reflejan el descontento generalizado.
El panorama es sombrío para Racing, que solo ha sumado 4 de 18 puntos posibles en el torneo local. A esta situación se le suma la eliminación en la Copa Sudamericana y una goleada previa en la Copa Libertadores, dejando al equipo sin una brújula clara en el campo de juego.
Con un futuro incierto, Racing tendrá una semana decisiva. La AFA debe decidir sobre la sanción de Gustavo Costas, quien vio el partido desde el palco, y el equipo debe prepararse para los
Buenos Aires, Argentina. El fútbol de Racing se desplomó en La Paternal. La contundente derrota 4-1 ante Argentinos Juniors no fue un simple traspié, sino una dolorosa evidencia del desgaste físico y mental del equipo. El conjunto de Gustavo Costas evidenció una profunda merma apenas cuatro días después de su agotadora victoria 3-1 ante Peñarol en la Copa Libertadores, un partido que se jugó bajo una intensa tormenta que dejó a los jugadores exhaustos.
La euforia por el triunfo copero se desvaneció en el estadio Diego Armando Maradona. Si bien la Academia se adelantó temprano con un gol de Tomás Conechny, la reacción del local fue fulminante. Con goles de Alan Lescano, Hernán López Muñoz, Matías Giménez y Nicolás Oroz, Argentinos destrozó a un Racing sin piernas ni ideas.
De la épica copera a la furia local
La caída profundizó la crisis institucional. El equipo, que venía de celebrar el triunfazo en su primer partido internacional, no pudo trasladar esa mística al ámbito local. Con solo 4 de 18 puntos posibles en el Clausura, Racing se encuentra en el fondo de la tabla y con un futuro incierto.
La hinchada, que venía eufórica, canalizó su frustración en redes sociales, donde el propio Conechny, autor del único gol de Racing, fue uno de los principales señalados por la afición.
Mientras el club intenta asimilar la derrota, el entrenador Gustavo Costas vio el partido desde el palco, sumando una preocupación más a su situación personal. De seguir así y en el supuesto caso de que no ganen la Libertadores se complicaría todo.