Peñarol arrancó la temporada 2012/13 con el pie izquierdo; los carboneros goleaban a Fénix y legendario capitán Antonio Pacheco les regalaba un golazo, pero «el Tony» sufrió una fractura y el «manya» se desmoronó: 4-3 ganó Fénix. El argentino Bologna un pésimo debut (Foto: Peñarol.org)
La hinchada carbonera estaba ilusionada en la previa, y razones había, la directiva del popular club uruguayo abrió su billetera y compró jugadores para cubrir las zonas «flojas». El emblemático Antonio Pacheco fue contratado nuevamente, luego de una temporada de ausencia a pedido de los seguidores mirasoles.
En la cancha estaba el modesto Fénix, club que llevaba 32 años sin ganarle a Peñarol, por eso, a los 9′ de juego el equipo de Capurro se puso en ventaja gracias a un error del arquero argentino Enrique Bologna, quien debutaba en el arco mirasol. Hernán Novick fue el autor del 1-0.
Peñarol no dejó agrandarse al equipo rival e inmediatamente, casi como un rayo, fue en busca del empate y lo logró por medio de Zambrana.
Ya con viento en la camiseta un inspirado Peñarol aprovechó el empate y otra vez Zambrana volvió al gol. El mirasol ganaba por 2-1 y se floreaba frente a la multitud que se dio a la cita en el Estadio Centenario.
Antonio Pacheco, el gran ídolo peñarolense, a los 21′ coronaba el 3-1 y parecía que el aurinegro iba camino a una goleada histórica.
Bologna, el arquero de Peñarol, cometió su segundo error garrafal al querer rechazar una pelota y el jugador Mauro Guevgeozian no perdonó: 3-2, descontaba Fénix.
El «Tony», quien retornaba y vivía un momento de felicidad inexplicable, chocó con el jugador panameño Eric Davis y sufrió una fractura de tibia; transcurrían 40′ del primer tiempo. El estadio Centenario se quedó mudo.
Tras el desastre producido por la fractura de Pacheco, quien le gritó al entrenador rival Eduardo Favaro «¡¡Me quebré Favaro, me quebré!!», el partido tuvo un cambio dramático.
Pallas puso el 3-3 en los descuentos del primer tiempo, su cabezazo terminó en el fondo de las piolas y con empate se fueron al descanso.
Fénix supo sacar réditos de un Peñarol desorientado por la casi trágica salida de su capitán Pacheco y en la segunda mitad, el equipo del barrio de Capurro le tomó el tiempo.
A los 21′ de nuevo Guevgeozian puso el 4-3 y lapidó al carbonero. Peñarol viviendo la amargura de la fractura de su ídolo, ya sin ideas y con un resultado en contra que no supo remontar.
Los albivioletas tardaron 32 años en volver a vencer a Peñarol, y este día será inolvidable para ambos.
@lostribuneros