Qué poco le duró la alegría al flamante campeón del fútbol argentino. Boca Juniors con todo su glamour y los bríos de haber obtenido un título más a su riquísima historia sucumbió ante un modesto equipo del interior que hace todo lo posible por sobrevivir y que acaba de caer a la Segunda División; Patronato se les plantó en el Bicentenario de San Juan para lograr histórico pasaje a la final de la Copa Argentina.
Sin dudas que el fútbol da sorpresas. Es mágico. Tremendo lo logrado por un «Patrón» que llegó silencioso, cabizbajo, lleno de angustia ante el tremendo bullicio que generó la obtención de la Liga Profesional días atrás por parte de Boca Juniors.
Los entrerrianos este fin de semana cayeron a la Primera Nacional siendo el último consuelo dejar afuera a otro de los grandes porque anteriormente había despachado a River Plate por Copa Argentina.
En la cancha el juego arrancó con gol de Marcelo Estigarribia en el minuto 32 mientas que Sebastián Villa igualó para el Xeneize de penal en la complementaria. Gracias al equilibrio debieron ir a los tiros penales donde los de Paraná tuvieron mejor puntería logrando así la victoria que los llevará a jugar una final histórica.
Por la otra llave Talleres de Córdoba batió por la mínima a Banfield y será rival del «Patrón» por un título que quedará en el interior de Argentina.