Amnistía Internacional (AI) divulgó un informe sobre las condiciones miserables en las que trabajan los inmigrantes en las obras de los diversos estadios y centros deportivos de Qatar.
Los qataríes no pierden el tiempo y con mucha antelación están preparando una Copa del Mundo que se celebrará en ocho años. Sin embargo AI divulgó un informe sobre la forma es que son tratados los inmigrantes que trabajan en las obras de construcción de los estadios, centros deportivos y afines.
es Un país millonario que cuenta con dinero de sobra pero que no tiene problemas para abusar de seres humanos.
El Organismo denunció que los trabajadores extranjeros viven y trabajan en condiciones precarias, peligrosas, que en más de una ocasión ha costado vidas, y en muchos casos trabajan en condiciones de esclavitud. Los empleadores han sido también denunciados por confiscarles los pasaportes a sus operarios.
Amnistía entrevistó entre febrero y marzo del 2015 a 132 empleados de construcción quienes realizan tareas en el estadio Khalifa, y a otros 99, de la Aspire Zone.
Los obreros no tuvieron problemas en contarle a AI que son obligados a vivir en «alojamientos insalubres» y en condiciones de «hacinamiento».
Oriundos de India, Nepal y Bangladesh son la mayoría de los obreros víctima de abusadores, que además, aseguraron que no pueden retornar a sus países de origen dado que les fue confiscada la documentación, y hasta amenazados en caso de denunciar su situación laboral precaria.
Qatar es un país donde el dinero proveniente del petróleo abunda y las ostentaciones son muchas, sin embargo, son incapaces de pagar un salario digno para los trabajadores, quienes apenas perciben salarios promedios de 130 dólares por arduas e interminables jornadas de trabajo bajo un calor infartante.
Varios informes llegaron a nuestra redacción años atrás sobre muertes de obreros por paro cardíaco debido que los hacían trabajar duro bajo temperaturas que superaban ampliamente los 45º.
Las denuncias efectuadas por AI indican que los trabajadores deben pagarle a los “reclutadores” de sus respectivos países entre 500 y 4.300 dólares para poder trabajar en el país qatarí. Además, indicaron que apenas reciben un salario por muy debajo de lo prometido, y muchas veces, no se les paga.
@lostribuneros