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Theo Hernández rompió el silencio desde el exilio dorado en Arabia y mandó al frente a los capos del Milan, confesando que lo echaron a patadas mientras le inventaban una fama de mercenario que él niega rotundamente.
El lateral francés Theo Hernández denunció este 20 de diciembre en La Gazzetta dello Sport que su salida del AC Milan en julio de 2025 fue producto de una extorsión digna de una película de gánsteres de bajo presupuesto.
Theo, que ahora factura 20 palos anuales en el Al Hilal, aseguró que nunca pidió fortunas para renovar y que la dirigencia le puso un revólver simbólico en la nuca para que se tomara el buque.
«Cuando un directivo te llama y te dice ‘si te quedás te cortamos del equipo’, ¿qué puedo hacer?», disparó el francés, dejando claro que en el club rossonero la diplomacia murió el día que echaron a Paolo Maldini.
El defensor recordó con nostalgia cuando Maldini lo llamó para tomar una naranjada en Ibiza, comparando esa era dorada con el «infierno» actual manejado por gente que, según él, «quiere arruinarte la vida y la carrera».
«Decían que pedía cantidades exorbitantes… todo falso», sentenció Theo, quien pasó de ser el defensa más goleador de la historia del club a ser moneda de cambio por apenas 25 millones de euros.
Incluso tuvo tiempo para atender a su excompañero Rafael Leão, de quien dijo que es un fenómeno pero que «a veces tiene la cabeza en cualquier lado», una descripción que bien podría aplicarse a toda la cúpula del Milan.
Hernández cerró la puerta con candado y tiró la llave al desierto, asegurando que mientras estén «ciertas personas» en el club, no piensa volver ni para saludar a los utileros, mientras asume sus errores con la hidalguía que le faltó a sus jefes.
El Saldo de la Traición
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Destino: Al Hilal (Arabia Saudita).
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Contrato: 3 años, 20 millones de euros por temporada (para llorar con estilo).
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Sentencia: «Mientras estén ciertas personas, no vuelvo».
Próximo paso del «fugitivo»: Theo seguirá sumando petrodólares bajo las órdenes de Simone Inzaghi en Al Hilal, mientras el Milan intenta explicarle a sus hinchas cómo pasaron de tener al mejor lateral del mundo a tener un equipo manejado por cobradores de morosos.
