Tribunero.com Portal futbolero
Leer redes sociales y ver a los hinchas modernos, los que apelan al celular y jamás a un libro. El hincha sin memoria, o más bien, con memoria a corto plazo. Los que piensan que es el gobierno uruguayo el que paga el jugoso salario del Maestro Tabárez, sin tener idea que se trata de un ente privado, no estatal. El que grita a los cuatro vientos que se trata de la «mejor camada de todos los tiempos» sin tener en cuenta que hubo jugadores muchos mejores que estos que están de moda, que también, con mejores condiciones quedaron afuera de mundiales.
Uruguay durante mucho tiempo siempre fue un país de avanzada. Nulo nivel de analfabetismo. Siempre adelante en cuanto a leyes. Mejor distribución de la riqueza respecto a países de América Latina. Sin embargo, la globalización les está haciendo estragos.
El hincha, desde la comodidad de su casa, influenciado por los cancheritos de la cámara que gritan y que parecen ser entrenadores de fútbol cuando en verdad son comunicadores, que no es lo mismo, se siente también juez y con derecho a gritar, insultar, denigrar y menoscabar.
Es cierto que la performance del Maestro Tabárez está en su peor momento, y que es momento de que haya un cambio. ¿Pero, en este momento? Uruguay todavía tiene chances. Nada está perdido.
Rompe los ojos ver gente que con una vergonzosa ignorancia dice que el gobierno de izquierda (Frente Amplio) que gobernó desde 2005 hasta 2020, derrochó millones de dólares de las arcas de los bolsillos de los uruguayos para pagarle al cuerpo técnico, cuando el fútbol no es un ente estatal sino que se financia con inversiones privadas.
Luego hablan del mejor equipo de la historia porque gracias a la Ley Bosman cualquiera que tenga documentación europea puede jugar en las mejores ligas, por lo tanto, muchos uruguayos nietos de tanos y de gallegos tuvieron chances de entrar a un fútbol que es totalmente diferente al de hace 30 años.
«Mejor equipo de la historia», dicen, donde la mayoría no ganó nada salvo Suárez y Cavani, pero llaman a Tabárez «perdedor». Estos ignorantes no saben que el Uruguay eliminado de España 1982 tenía un equipo superior a este plagado de «ganadores» que no jugaban en Europa porque las diferencias económicas entre el viejo continente y lo que pagaban acá en Sudamérica era prácticamente lo mismo.
Ese Uruguay eliminado en 1981, meses atrás había ganado el «Mundialito», que se trataba de un certamen que reunió a las selecciones campeonas del mundo, organizado por la FIFA y jugado íntegramente en el Estadio Centenario. Ese equipo charrúa, como todos los equipos del continente, no sabían de traer jugadores que jueguen afuera, salvo que lo hiciera en Argentina o Brasil (Krasouski en Boca, Ruben Paz en Inter de Porto Alegre, Hugo de León en Grêmio).
Estos nenes eran ganadores de verdad. La mayoría supo ser campeón de América en lo que hoy es la Sub 20 (torneos de 1977, 1979 y 1981) e incluso, meses después de quedar afuera de España, el mismísimo Peñarol se consagró no solo campeón de América, sino que del Mundo al batir al poderoso Aston Villa por 2-0 en Tokio.
Y si vamos nombrando figuras hubo nombres que hoy valdrían millones de dólares y que, seguramente, estarían jugando en Real Madrid, Milan, Bayern, PSG, Barcelona, Juventus, Inter y compañía, pero era otro mundo. Para los DT en esos tiempos era mucho más fácil porque en Europa apenas tres extranjeros por equipo podían jugar, no como hoy donde pueden ser los once, salvo en la Bundesliga.
Si hacemos memoria podemos ir para atrás, para el fracaso de Argentina ’78 donde quedaron por el camino con el fanfarrón de JR Carrasco que hoy habla como si fuese Sir Alex Ferguson.
La ignorancia hace estragos. Una pena que el facilimismo que da internet hoy por hoy destroce la mente de las mayorías.
