Las obras van a llegar sobre la hora, de cara al Mundial 2014, y un atrasado estadio Arena da Baixada de Curitiba, precisa que el césped crezca para «ayer», por eso, colocaron en la cancha un sol artificial, importado de Holanda.
El estadio tiene una cobertura que le quita luz natural y retrasa el crecimiento de la gramilla, por eso, los especialistas decidieron importar del país europeo un equipo de iluminación que imita al sol, provocando la fotosíntesis del césped.
Philips, hace unos años, logró despertar a un gallo a las 3 de la mañana con un «sol artificial».
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