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De no creer. Si pensamos que la goleada recibida por 1-6 del Manchester United ante Tottenham Hotspur en Old Trafford había sido la noticia, nos quedamos cortos porque Aston Villa dio el batacazo en casa al propinarle un histórico 7-2 al campeón Liverpool.
Esta cuarta jornada de la Premier League quedará en los anales de la historia del fútbol inglés; Manchester United y Liverpool recibieron 13 goles.
El apodo del Aston Villa es «villanos», así fue, se comportaron como unos verdaderos villanos porque directamente le pasaron por encima a la oncena de Klopp.
Liverpool parece que dejó a sus defensores en el vestuario de Villa Park. Cada ataque del Aston Villa terminaba en gol, salvo una pelota que se estrelló en la transversal, un par de atajadas importantes de Adrián y alguna que otra pelota que pasaba rozando los postes.
Dean Smith hizo un planteo perfecto. Su equipo sacó réditos de una defensa y un medio campo que no tenía nada que ver con este partido. Keita, Fabinho y Wijnaldum desconocidos, no sabían qué hacer con Watkins ni como parar a este hombre que se mandó un triplete.
Mohamed «Trezeguet», Grealish y Barkley se hicieron un festín. La defensa del Rojo invitaba a los adversarios para que anoten; Alexander-Arnold, los centrales Gómez y Van Dijk y el otro lateral Robertson estaban para el cuento. Hacían agua por cada lado.
Tremendos golazos, y también el factor suerte, estuvo del lado villano. Les salieron todas directamente; Watkins se mandó un doblete en el minuto 4′ y 22, pero apareció el egipcio Mohamed Salah para achicar en el minuto 33.
Cuando anotó Salah, dio para creer que este gol iba a servir de acicate para que lograr el empate parcial, y por qué no, la reversión del resultado en el complemento, pero nada, fue fantasía.
Tras el gol de Salah, dos minutos después McGinn puso el 3-1 que daba para creer que si Liverpool pretendía salir airoso del Villa Park iba a tener que remar de lo lindo. Sin embargo, toda ilusión cayó por tierra luego de que en el minuto 39 Watkins se mande su triplete y terminen la primera parte 4-1.
Un desanimado Klopp sacó a Keita en el entretiempo y puso al japonés Minamino que le cambió la cara al atque, sin embargo no movió el medio para balancear la defensa, de ahí, le llenaron nuevamente la canasta con tantos de Barkley y doblete de Grealish para completar el histórico 7-2. Mohamed Salah al menos se mandó los dos goles de los Reds.
Fiesta y pico para Everton porque en esta jornada 4 pica como único líder con puntaje perfecto porque, además, Leicester cayó goleado.
Con viento en la camiseta el «Dibu» Martínez tiene todas las chances de convertirse en el arquero titular de Argentina este próximo jueves por eliminatorias.
Aprovechando este río revuelto el equipo «Villano» quedó en el pelotón de escoltas con nueve unidades; puntaje perfecto tiene porque ha jugado tres encuentros.
@lostribuneros
