El volante del Colo Colo terminó en prisión, tras el superclásico por salivar, pisar y pasar por sus genitales una bandera de la Universidad de Chile. El hecho ocurrió el pasado domingo, tras el final del partido en el cual el Cacique venció 1-0, por el Torneo Clausura.
Silva fue detenido inmediatamente por la policía chilena, en pleno Estadio Nacional de Santiago. Pasó la noche en la cárcel y se tuvo que presentar ante un juez el pasado lunes. Tras su declaración, fue puesto en libertad condicional. El jugador deberá responder a un juicio y podría recibir un año y medio de prisión por este hecho. Además, recibirá una dura sanción por parte de la federación de fútbol chilena (ANFP).
El caso es que Jason Silva, al final del juego, fue provocado por la hinchada de la Universidad de Chile que le arrojó con una bandera, lo que provocó la ira del jugador que estaba festejando el triunfo de su equipo. Silva perdió la cabeza y resfregó la bandera por sus partes íntimas. La policía actuó de oficio y en los vestuarios detuvo al deportista, que fue llevado a la comisaría..
El jugador estuvo detenido en una celda individual común de una comisaría de la ciudad de Santiago de Chile. Tuvo que ser aislado por temor a que entre los presos haya algún hincha de la U de Chile. Según colegas trasandinos, el lugar donde fue recluído apenas contaba con apenas un sillón de madera, para que el volante durmiese ahí toda la noche.
@lostribuneros