Tribunero.com Portal futbolero
Mientras los dirigentes mendigan clemencia en Suiza, el orgullo de Cochabamba se hunde en el fango de la B por culpa de una ficha mal pegada y un fútbol inexistente.
El Jorge Wilstermann descendió directamente a la segunda división del fútbol boliviano tras un fallo lapidario del TAS que le devolvió 33 puntos a Aurora, dejando al «Rojo» como el colista absoluto de la temporada 2025 con apenas 19 unidades de lástima.
La justicia internacional decidió que el error administrativo con la ficha de Diego Montaño no era para tanto, y con un plumazo mandaron al «Aviador» a morder el polvo del ascenso, cancelando incluso la promoción que tenían contra San Juan FC.
«Es un golpe histórico», lloriqueó la dirigencia cochabambina, que ahora promete viajes a Suiza como si el chocolate europeo pudiera borrar las humillantes goleadas de 2-7 ante Always Ready y el 6-1 que les propinó Real Tomayapo en la cancha.
Es el segundo descenso de un club que se cree grande pero gestiona como equipo de barrio; ya en 2010 se fueron a la B siendo campeones, demostrando que en el universo Wilstermann, el ridículo es la única constante que su numerosa hinchada no merece.
Con la serie contra San Juan FC borrada del mapa por la Federación, el destino está sellado: en 2026, el gigante del Valle jugará en la Asociación de Fútbol de Cochabamba, compartiendo vestuarios con equipos que tienen más ganas que presupuesto.
EL ABISMO EN NÚMEROS
Tras la resolución, Aurora pegó el salto a la mitad de tabla asegurando su permanencia, mientras que ABB heredó el puesto del indirecto. Wilstermann terminó último (16°) con 19 puntos y ya no tiene partidos en el calendario profesional; su próxima cita será en el barro de la liga regional.
