En el Mundial de Estados Unidos en 1994, el ruso Oleg Salenko le convirtió cinco goles a Camerún, estableciendo un récord en la competencia. Muchos periodistas tenían el dato de que Juan Schiaffino, uno de los hacedores del Maracanazo, había marcado esa cantidad en el Uruguay 8- Bolivia 0 de la primera ronda de Brasil 50. Fue así que un cronista del vecino país le preguntó qué sentía al haber «igualado» el récord.
La respuesta del ya veterano «Pepe» fue contundente: «¿De qué récord me habla?» El periodista le comentó el dato que hasta allí tenía. Schiaffino, de forma noble, agregó: «Lo justo es justo y no quiero adjudicarme goles que fueron de otros compañeros. Omar Míguez hizo tres, yo dos (de los cinco que se le atribuían), y los demás fueron de Vidal, Julio Pérez y Ghiggia».
Diego Yamus
@lostribuneros