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La vida del histórico goleador inglés va cuesta abajo. No basta con el ejemplo del ex futbolista Paul Gascoigne, estrella de Inglaterra de los ’90, quien vive en la indigencia y en el olvido, para que Wayne Rooney siga por el mismo camino.
El astro ex Manchester United, hoy en Everton, atraviesa serios problemas con su adicción al alcohol y relaciones extra matrimoniales. El diario The Mirror indicó que Coleen McLoughlin, esposa del atacante, lo puso entre la espada y la pared, obligándolo a que revele todas sus «historias» con mujeres y con el alcohol.
Todo se complicó cuando Rooney fue «pescado» por la policía manejando en estado de ebriedad, tiempo atrás, acompañado de una mujer que había conocido esa misma noche en un boliche.
Su esposa, con quien se conocen desde los 16 años, le ha dado el ultimátum, o deja el fútbol y compone las cosas, o va por el divorcio. Vale indicar que está esperando el cuarto hijo de ambos.
Para colmo, Ronald Koeman, técnico del Everton no está a gusto con el desempeño del veterano crack en los entrenamientos.
Los excesos están llevando a la ruina a un futbolista que hizo fortunas en el balompié, especialmente en Manchester United.
@lostribuneros
