Otro fracaso más a nivel local para Marcelo Gallardo. El Muñeco a nivel continental ha logrado beber grandes sorbos de la Copa Libertadores y una Copa Argentina, pero lo que es el torneo de élite lo tiene atravesado aún; derrota con Independiente que lo deja marginado de llevarse el trofeo a casa.
De capa caída llegaron los Millonarios a la cancha de Banfield para jugar de local ante Independiente por la última fecha del Grupo A. La derrota por goleada ante Palmeiras por Copa Libertadores dejó tocado emocionalmente al equipo del Muñeco, que debía ganar si o sí para meterse en la final y esperar un empate de Boca Juniors ante Argentinos, en Paternal.
Lo del empate se dio. Boca terminó igualado a dos con el Bicho y a River le quedaba el camino abierto, claro, era en simultáneo y lo comentamos con el diario del lunes, pero el hecho es que River Plate cayó por 2-0 ante el un Rojo que tuvo como anotador de las dos conquistas a Alan Velasco en los minutos 25 y 40; uno de los tantos fue con blooper de Armani incluido.
Con el Nacho Fernández y Angileri en la cancha, los millonarios no pudieron ante un Independiente que se quedó sin Lucas Pusineri como entrenador, debiendo apelar a Fernando Berón como interino.
Con Asis y Lucas Romero en el medio y Soñora por detrás de Silvio Romero los rojos encontraron el gol gracias a un futbolista que se mueve por el sector izquierdo del ataque como Alan Velasco, quien tiró desde afuera y anotó dos veces.
Marcelo Gallardo discutió un fallo del árbitro, faltó el respeto y terminó siendo expulsado. Mientras tanto su equipo ahora deberá intentar dar vuelta el 0-3 ante Palmeiras en San Pablo para seguir con vida en la Libertadores o pasar borrador a un 2020 que le fue nefasto.
Boca Juniors, que en marzo del año pasado en la última fecha le arrebató el título de campeón, nuevamente se verá en una final.
@lostribuneros