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Cuando en 1981 Argelia alcanzó por primera vez un Mundial, pocos sabían del país del Norte de África y mucho menos de su selección. Ese verano en España, los novatos se presentaron como expertos batiendo a la majestuosa Alemania Federal, pero por el desgraciado episodio del arreglo entre éstos y Austria fueron marginados. Así fue la aparición de un conjunto que, sin embargo, con las décadas perdió peso frente a sus pares fuertes del continente, caso Egipto o Marruecos. Ahora, superó un grupo ideal para su necesidad y vuelve a la Copa a arrancar contra Argentina, aunque no sabemos si con aquella fuerza del 82.
Argelia ya jugaba de forma encubierta al ser colonia de Francia a fines de los años 50, primero como Armées de Liberación Nationale y luego como Frente de Liberación Nacional. En realidad, su primer encuentro oficial con su independencia fue en 1963 con triunfo 2-1 sobre un europeo de moda, Bulgaria. Por largo tiempo, igualmente, permaneció en un rincón al tomar poca participación internacional, limitada a torneos regionales. Recién en 1968 arribó a su primera Copa Africana de Naciones, sólo para no pasar de fase, y para México en 1970 disputó su primera eliminatoria, lo que resultó sin éxito hasta 1980, cuando una generación talentosa encabezada por Lakhdar Belloumi y Rabah Madjer les dio fama a los ojos del resto.
Esa década del 80 fue la más productiva para los Zorros del Desierto, tal su apodo. La sorpresa inicial la dieron en marzo en la Copa de Naciones de Nigeria, siendo subcampeones del local, mientras a medio año harían buen papel en su debut en los Juegos Olímpicos de Moscú, donde cayeron en cuartos de final con Yugoslavia, una de las potencias del dominante este. Y luego, a pesar de varios cambios de técnicos que no se adaptaban al clima árabe, fue progresando hasta batir a la propia Nigeria dos veces y llegar a España, donde parecía ir a segunda ronda tras vencer a los germanos y a Chile, pero el lamentable pacto entre europeos lo privó, aunque la gente local los envolvió en su aliento. Un pequeño desquite fue el tercer lugar en otra Copa Africana de Naciones en 1984 y su segunda mundialista en el 86, pero fueron superados por Brasil y España. Otro podio en la CAN de Marruecos 88 era el preludio a otro Mundial, más se toparon con Egipto que los derrotó en las finales, un dolor que paliaron con la Copa regional de 1990 en su tierra, donde con una nueva camada derrotaron otra vez a Nigeria y llegaron a su primer título internacional.
DEBIERON pasar casi dos décadas para que los verdes volvieran a algo grande. Porque en las sucesivas CAN que participaron no fueron ni por asomo los de antes, hasta superados por sus vecinos o por países menores. Recién en 2009 fueron noticia cuando vencieron a Egipto en un desempate caliente en Sudán y arribaron a su tercer Mundial, justamente el primero en África, el de Sudáfrica 2010. Contaron un equipo interesante que sin embargo no saltó la primera fase, aunque le igualó a la gran Inglaterra. Y en 2013 le ganaron a Burkina Faso por más goles de visitante y accedieron a su segunda Copa en Brasil. Allí, los Fegouli, Bougherra, Brahimi o Slimani cumplieron tan notable tarea que luego de pasar la fase grupal se encontraron a Alemania en octavos de final, y tuvieron a cero a los futuros campeones hasta el alargue en que Alemania se impuso 2-1. Para entonces disputaron su único antecedente con Argentina, el 5 de junio de 2007 en el Camp Nou de Barcelona, donde los de Alfio Basile ganaron 4-3 pero con susto y muchos errores defensivos.
Esta segunda etapa fructífera de Argelia terminó cuando en 2019, con Ryad Mahrez como nuevo emblema, venció a Senegal 1 a 0 y en Egipto se llevó su segunda Copa Africana. Dos años después, el once ahora llevado por Djamel Belmadi se alzó con la Copa Árabe, al doblegar a Túnez 2 a 1. No pudo continuar aquel lauro continental del 19 al quedar lejos en las ediciones de 2021 y 2023, pero conducido por el bosnio Vladimir Petkovic, arrasó en la despareja zona y tocó tierra mundialista por quinta vez, con siete puntos de ventaja sobre Uganda y con un tremendo goleador como Mohamed Amoura, que se agrega a Mahrez, Bounedjah y Bentaleb como los más valiosos del país. En 2026, América del Norte lo espera con un arranque bien argentino. Quizá sea la ocasión justa para que el gran Argelia reencuentre su lugar en el mundo del fútbol.
Diego Martín Yamus.
