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Los mirasoles se llevaron una festejada victoria del Estadio Centenario, luego de vencer por 2-1 a Montevideo Wanderers y de atrás. Peñarol con esta victoria le sacó 4 puntos a sus seguidores y un triunfo en la próxima jornada le daría el título del Apertura uruguayo (Foto: Peñarol.org)
Peñarol tuvo que sufrir en esta jornada 13 y parecía estar atado frente a un equipo de Montevideo Wanderers que le fue a jugar para ganar. Los bohemios se defendieron muy bien y presionó frente al área mirasol y dejó que el reloj corra.
A medida que el tiempo pasaba el equipo hoy vestido todo de amarillo era sabedor que un punto ayudaba pero les quitaba la comodidad que precisaban para seguir en marcha.
Peñarol desesperaba por llegar al primer gol del partido y Wanderers supo jugar con esa ansiedad, por eso, a los 15′ del segundo tiempo el coloniense Sebastián Gagnebin le tiró con un balde a agua helada a los 20.000 aficionados apostados en las graderías del mítico estadio Centenario montevideano.
Wanderers ganaba por 1-0 y este gol, insólitamente, benefició a su rival Peñarol, quien no le quedó otra que apelar a su temperamento y, casi como un león herido, tuvo que ir al frente en busca del gol.
El capitán Darío Rodríguez Peña de cabeza puso el tanto del equilibrio a los 20′ y apenas 3′ después el «Lolo» Estoyanoff remató rastrero desde afuera del área, el balón se desvió y terminó en el fondo de las piolas.
Los carboneros ganaban por 2-1 y tuvieron varias chances más para aumentar, Zalayeta generó una muy clara, luego hubo otra de Zambrana que fue sacada de la línea.
Wanderers estuvo cerca de aguarle la fiesta al mirasol pero el arquero argentino Enrique Bologna tuvo su momento de lucimiento y sacó balones importantes que fueron festejados por la falange carbonera.
El manya ganó y le sacó 4 puntos a falta de dos fechas a El Tanque, Defensor y Nacional.
Juega el próximo sábado de local frente a Juventud de Las Piedras y ahí podría dar la vuelta olímpica.
Romina Guimaraes
@lostribuneros
