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El equipo carbonero se llevó una victoria más que festejada del Estadio Centenario, luego de superar 2-0 a Bella Vista por la jornada 3 del Torneo Clausura uruguayo. Peñarol logró cambiar la pisada en el arranque de la temporada 2012/13.
Los mirasoles tenían que ganar para cambiar el sabor amargo, dejar atrás la adversidad de la derrota inicial y de la fractura de su ícono Antonio Pacheco en la primera jornada del Clausura, por eso, los peñaroles entraron al campo a llevarse por delante al rival papal, aunque al final fueron sorprendidos por un papal agresivo, terminaron logrando el objetivo.
Enrique Bologna, el arquero argentino superó el trago amargo del arranque del campeonato y pudo demostrar su talento, luego que a los 5’ Federico Laens le cabecee en el área, y el guardavalla carbonero la desvíe por encima de la transversal.
Peñarol no se quedaba atrás y replicaba, tanto fue así que a llegó a la apertura del marcador por medio de Juan M. Olivera a los 16’.
El gol tranquilizó al club carbonero y obligó al papal a buscar el resultado, mientras que a los mirasoles le quedaba espacios para salirle de contra y poder lograr aumentar las cifras.
Jorge Zambrana tuvo su chance al anotar el segundo tanto pero el linesman sancionó una posición adelantada.
La complementaria arrancó con el equipo que tiene los colores de la bandera del Vaticano, dueño de la pelota y del dominio táctico. Bella Vista pudo cortarle el juego a los carboneros pero su falta de potencia en el ataque les jugó en contra.
El carbonero logró marcar el lapidario 2-0 a los 20’ cuando el hábil Juan Manuel Olivera, quien entró al área con la pelota dominada y fue derribado en el área por el defensor Gastón Pagano; el propio Olivera ejecutó la pena y la mandó al fondo del arco.
Con el partido controlado y un rival abatido, el entrenador Da Silva mandó a la cancha a dos juveniles llamados Alejandro Siles y Sebastián Gallegos para que vayan fogueándose en la primera división.
El flagelo del equipo papal fue la falta de eficacia en el ataque, algo que conspiró en su contra y terminó repercutiendo en el marcador.
Peñarol logró sumar de a tres y esto sirve como motivación, pero es bueno señalar que al equipo de Da Silva le falta mucho por resolver. Algunos jugadores estuvieron muy bajo y la ausencia de un enganche en el mediocampo es notoria.
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