Peñarol arrancó el Torneo Apertura 2025 con una sonrisa de oreja a oreja tras batir en el Centenario por 3-1 a Progreso. Báez, García y Silvera anotaron para el Carbonero. El equipo de Diego Aguirre es vigente campeón del fútbol uruguayo.
El partido se encendió desde temprano, cuando Jaime Báez abrió el marcador al minuto 19, anticipando el dominio que marcaría el encuentro. La exhibición de Peñarol fue de orden y determinación, creando varias ocasiones claras durante el primer tiempo. Aunque Progreso tuvo sus momentos y logró reducir la diferencia en el tiempo añadido mediante un penal convertido por Nicolás González, la respuesta de Peñarol fue rápida y contundente. Diego García amplió la ventaja en el minuto 61, seguido por Maxi Silvera, quien selló el triunfo al minuto 74, dejando claro que el equipo se encontraba en plena sintonía ofensiva y listo para afrontar los desafíos venideros, como el inminente choque contra Nacional
Estrategia y contexto
Este resultado no solo es un triunfo en el marcador, sino también una reivindicación tras las dificultades sufridas en amistosos previos, donde las derrotas contra Nacional habían marcado una sombra en el ambiente del vestuario. Con la dirección técnica de Diego Aguirre, el conjunto se mostró sólido y decidido a recomponer su imagen, apostando por un juego dinámico y de gran calidad. La ausencia de figuras como Rodrigo Pérez y Javier Cabrera, suspendidos por incidentes anteriores, no fue impedimento para que el equipo desplegara su mejor versión y reafirmara su estatus como potencia del fútbol uruguayo
Un toque ameno para la hinchada
La afición, que siempre ha sido parte vital del ambiente en el fútbol local, encontró en este triunfo un motivo para celebrar y renovar las esperanzas de un torneo prometedor. Con goles que evidencian tanto la precisión en el pase como la efectividad en la definición, Peñarol no solo dejó claro su objetivo en la campaña, sino que también entregó un espectáculo vibrante y lleno de emociones, digno de las grandes noches en el Centenario.
En definitiva, el debut campeón se traduce en un mensaje claro: Peñarol está listo para defender su corona y retomar el camino del éxito en el Apertura 2025, combinando experiencia, calidad técnica y una actitud inquebrantable que hace latir con fuerza a su apasionada hinchada.