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Cristian Pavón, argentino, y Nahitan Nández, uruguayo, son dos de las figuras de este arrollador Boca puntero de la Superliga con 12 puntos sobre sus lejanos escoltas. Y por sus rendimientos, por sus cualidades, ambos merecen estar en su selección en el próximo Mundial de Rusia 2018.
Pavón (22 años), surgido en Talleres de Córdoba y de paso por Colón de Santa Fe, llegó a Boca en 2015 y desde entonces es una pieza importantísima en el ataque xeneize, tanto que ha firmado largo contrato cuando parecía desembarcar en el Zenit ruso. O, más aún, cuando algunos lo criticaban. Es la llave de cada partido frente a defensas cerradas,con su velocidad y desborde, y desde un tiempo, también es goleador, aunque no sea un «nueve» natural. Fue el segundo realizador del título boquense en 2017. Un hombre así, ante un equipo como Islandia, el del debut para Argentina, es necesario. Se estrenó muy bien el día del 2-4 amistoso con Nigeria el año pasado, Y tal vez sea uno de los 23. Porque mucho Higuaín, Icardi, Agüero, hasta el genial Lautaro Martínez, pero con las características de Pavón hay pocos.
En cuanto a Nández, tiene sólo 22 años, y sin embargo es el típico caudillo uruguayo. Un caudillo joven, con lo que la celeste tiene para rato en un puesto y una responsabilidad de mando semejante. Y será necesario que Oscar Tabárez lo cuente en Rusia y si es posible, como titular. Porque no sólo mete, contagia, va de aquí para allá. Ahora resulta que se anima a ser un goleador más, como este domingo ante San Martín o como el gol decisivo ante River para ganar el superclásico.
Hombres descollantes, por habilidad o por presencia. Argentina y Uruguay deben llevar al Mundial lo mejor. Y ellos son de lo mejor.
Diego Martín Yamus.
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