Holanda le ganó a México por 2-1 en el Castelâo de Fortaleza por cuartos de final con goles marcados sobre el final del partido. El “Tri” lo tenía ganado pero la “Oranje” no se entregó y con goles a los 88’ y 90’+3 se llevó la clasificación a cuartos (Foto: Reuters)
El resultado del partido, para el infarto por cierto, no tuvo nada que ver con un juego que fue, en líneas generales, anodino. México arrancó mejor en el segundo tiempo, presionando en el mediocampo y empujando a una Holanda que no le lucía.
Los aztecas comenzaron, desde el vamos, rematando al arco, ya que Layun a los 2’ casi la clava en un ángulo. Luego de eso, el “Tri” supo como entrarle a un equipo de Países Bajos, que no podía salir de contra, al encontrarse incómodo.
A los 8’ Van Gaal tuvo que sacar del campo, lesionado, a De Jong y puso a Martins Indi, pero ese “cambio quemado” no desmoralizó a los naranjas.
Por las bandas laterales los norteamericanos supieron llevar peligro y entrar al área defendida por Cillessen en varias ocasiones. Oribe Peralta y Giovani Dos Santos eran los encargados de meter peligro, mientras que Layún era un generador.
El equipo mexicano probaba de lejos, incluso, un remate de Salcido, que parecía intrascendente, acabó siendo desviado por el arquero “tulipán”.
Hasta el “tiempo muerto” el “Tri” mandaba, era superior a una Holanda que no era capaz de desplegar su juego, pero, luego del descanso de 3’, que es obligatorio e impuesto por el Ministerio de Trabajo de Brasil, sobre multa a la FIFA de 100.000 en caso de no cumplir con esta normativa, los anaranjados comenzaron a salir de su zona defensiva y tener la pelota, pero sin generar verdadero peligro.
Hubo una incidencia clave, antes de acabar el primer tiempo, cuando Robben tomó una pelota, a toda velocidad entró al área y fue derrumbado, solo que el referí portugués Pedro Proença no sancionó. A nuestro entender fue un claro penal.
30º hacía en la ciudad de Fortaleza, imaginamos que en el campo de juego y al sol, habría 5º más, por lo que los jugadores tenían que cuidar mucho sus energías, caso que lleguen al alargue.
El segundo tiempo comenzó con un claro dominio mexicano y a los 3’ Giovani Dos Santos sacó un zapatazo brutal y la mandó al fondo del arco de la Oranje; México estaba, con justicia, 1-0 porque era más y mejor que su adversario.
Con la ventaja parcial, los mexicanos se relajaron un poco y cedieron terreno al rival, que estaba obligado a empatar; Memo Ochoa sacó unas pelotas increíbles y daba para creer que la suerte estaría a favor del Tri, gracias a la actuación superlativa del arquero, pero quien cometió un grave error fue el técnico Miguel Herrera, porque en el mejor momento azteca, a los 16’ sacó al autor de la conquista Dos Santos y colocó en la cancha a un volante defensivo, Diego Reyes.
El error le costó caro a Herrera, porque al querer “cuidar” el resultado, a falta de 35’ (descuento incluido) agrandó a Holanda, y su colega Van Gaal no fue lento e hizo sus cambios también; quitó al defensor Verhaegh y puso al atacante Depay, colocando toda la carne en la parrilla y hasta arriesgo sacar a Van Persie, el gran goleador y colocar a Huntelaar.
Esos movimientos tácticos de uno y de otro, tuvieron una sensible influencia en el juego; los tulipanes comenzaron a dominar y Ochoa, arquero azteca, se lució. Cómo los holandeses se les vinieron encima, Herrera tuvo que hacer sus movimientos, pero el daño estaba hecho.
Robben comenzó a lucirse, con su habilidad, velocidad y experiencia empujó a su equipo; faltaban solo 2’ para el final y se percibía un inminente triunfo del equipo azteca, que por primera vez en la historia pasaría a cuartos de final, fuera de su casa.
Pero, Snejder sacó un zapatazo, al igual que su adversario Dos Santos y pagó con la misma moneda: ¡golazo!.
El tiempo estaba cumplido, el juego 1-1 y se venía el alargue, todos estábamos preparándonos para la prolongación, cuando el referí lusitano dio 3’ de descuento, más 3’ de recuperación, tiempo suficiente para que Robben sea derrumbado en el área, víctima de un claro penal por parte del capitán Rafa Márquez y Huntelaar no perdonó ¡GOL! y Holanda a los cuartos… México canta y no llora.
@lostribuneros