El 15 de abril de 2017, Panamá se sacudió con una noticia demoledora: Amílcar Henríquez, mediocampista defensivo de la selección de 33 años, había sido asesinado en la puerta de su casa.
El terrible suceso impactó al país entero, pero lo hizo de forma mucho más cercana a sus compañeros de la Marea Roja, que lloraron la pérdida de una de las personas más alegres en el vestidor, además de uno de sus grandes baluartes.
Hoy, casi seis meses después, son ellos mismos quienes recuerdan a Amílcar, y toman su ejemplo y memoria como motivación de cara al duelo trascendental ante México por las eliminatorias para la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018™.
Garra, corazón y talento
«Era una persona que se llevaba bien con todo el mundo», recuerda Abdiel Arroyo, excompañero suyo en el club Árabe Unido. «Todos lo queríamos por su sinceridad, su alegría. Y en el fútbol era un líder, un referente que jamás dejaba de luchar».
El mediocampista Armando Cooper, uno de los más cercanos a Henríquez en la selección, transita un camino similar. «Mis primeros pasos fueron a su lado, y siempre me brindó su apoyo. Más que un amigo, era un hermano para mí. Su pérdida fue muy dolorosa. Lo quería tanto que aún no lo puedo asimilar».
Como sucede en situaciones así de traumáticas, todos recuerdan el momento exacto en que se enteraron de lo sucedido. El testimonio más impactante quizás sea el de Gabriel Gómez, su ex compañero de habitación en la selección, con quien la relación entre ellos se extendía a sus familias.
«Estaba jugando un partido en Colombia, contra Santa Fe, y un jugador rival, Omar Pérez, se me acercó y me contó», rememora el futbolista de Bucaramanga.
«Yo me lo tomé como que él quería desestabilizarme, pero cuando lo repitió me di cuenta que era en serio. Entonces fui al camerino y ahí me enteré de la noticia, que fue confirmada por mi esposa un poco más tarde. Aún no lo puedo creer».
Una promesa y un compromiso
Con 7 puntos, Panamá marcha en cuarto lugar del Hexagonal Final de la CONCACAF, que lidera precisamente México, con 14. De ganar en el imponente estadio Azteca, los Canaleros darían un paso monumental rumbo a Rusia 2018™.
Es por eso que, pese a que el aguerrido mediocampista ya no está físicamente con sus compañeros, su ejemplo será una fuente de inspiración.
«Es una motivación extra», recalca el lateral izquierdo Eric Davis, que consideraba a Henríquez como su maestro. «Sin dudas, si estuviera aquí daría el ciento por ciento. Nos hace falta, era un gran jugador. Debemos hacerlo por él, somos conscientes de cuanto soñaba con estar en un Mundial».
Arroyo sabe lo que hace falta para mantener vivo el sueño de Henríquez. «Ganar en México. Estamos muy comprometidos, sabemos que nos está viendo de allá arriba y no habría mejor homenaje que sacar esos tres puntos. Por él, pero también por nosotros y por el país entero».
Fuente: FIFA
Diego Martín Yamus.
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