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Cada día quedan menos figuras históricas del fútbol. Este lunes se conoció la partida repentina de Johan Neeskens, cerebro del Ajax campeón de todo y de la fabulosa selección de Países Bajos subcampeona mundial en 1974 y 1978.
El genial mediocampista nacido en 1951 había comenzado en 1968 en el Racing Club de su natal Eemstede. El técnico de la naranja Rinus Michels lo vio y lo pidió para uno de los grandes equipos de la historia, donde junto a su compañero Johan Cruyff ayudó al Ajax a conquistar tres Copas de Campeones de Europa seguidas (1970, 1971 y 1972), la Intercontinental de 72, una Supercopa de Europa y varios títulos locales.
Autor de varios goles en las Copas del Mundo, se le recuerda el penal con el que abrió la final ante Alemania Federal en 1974, que los anfitriones dieron vuelta. En ese tiempo brilló en el Barcelona junto a Cruyff y Michels, alzando una Copa del Rey y una Recopa de la UEFA. Sus últimos años con la pelota los pasó entre el New York Cosmos y Fort Lauderdale Strikers de Estados Unidos, Groningen de su país y Zug de Suiza, en el que se retiró en 1991.
Luego vivió una corta experiencia como asistente de los cuerpos técnicos del Barsa y la selección de Australia. En 2020 fue incluido en el XI de Bronce del Balón de Oro. El ocho neerlandés suma su pérdida a la de Cruyff y de Rob Rensenbrink, otro recordado del tiro en el palo ante Argentina en la final del 78. Así también es otra figura que se va estos años, como Maradona, Pelé, Paolo Rossi, Eusebio, Jack Charlton, Franz Beckenbauer o Mario Zagallo. Por eso Johan Neeskens desde ahora actuará en el once del cielo.
Diego Martín Yamus.
diegoperiodista93@gmail.com.
