El emporio televisivo brasileño O Globo se mando una de película; los directivos del monopolio le regalaron 1000 entradas para el mundial a los patrocinantes pero a sus empleados les consiguieron algunas entradas pero la tuvieron que pagar a valor «FIFA».
Hubo regalos indiscriminados de entradas, y de las más caras, para los auspiciantes, pero para los empleados hubo un sorteo, hasta ahí todo bien, solo que cuando recibieron el «premio» les dijeron algo así como «bueno, te regalamos la chance de comprar una entrada» y al «beneficiado» le decían «es a valor FIFA».
Los empleados de O Globo pusieron el grito en el cielo.
@lostribuneros