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El volante uruguayo duró segundos en la cancha. Fue a disputar una pelota, cometió una falta y vio la roja directa.
Peñarol estaba 2-0 abajo con Nacional de Medellín en el Atanasio Girardot. Jorge Da Silva mandó al volante ofensivo en lugar de Nicolás Freitas a falta de 5′ para el cierre. Hernán Novick, al ver que perdía la pelota con un cafetero, le propinó una falta que le valió la roja. ¡Llevaba apenas segundos en el campo!. Sin dudas, se convierte en el expulsado más rápido de lo que va de la edición. Sin embargo, para nosotros fue exagerada su roja, ya que no fue a lastimar al adversario.
Vino a nuestra mente la final de la Copa Libertadores de 1981 entre Flamengo y Cobreloa, jugado en el Centenario de Montevideo, cuando el jugador Anselmo, del «mengâo», duró apenas diez segundos, ya que entró corriendo, le propinó un puñetazo a un chileno y vio la roja. En esa ocasión los brasileños ganaron categóricamente y fueron campeones.
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