NO subestimemos más al fútbol africano

Hoy en día, decir África en fútbol es decir calidad, potencia, es respetar, temer a sus cualidades aún poco desarrolladas. Ya no sólo es con grandes marca Camerún, Senegal, Egipto, Costa de Marfil. Ahora conocemmmos que Sierra Leona, Madagascar, Guinea Ecuatorial están a su altura y también son para no subestimar. Aunque hace rato no alcanzan los resultados de antaño, los equipos africanos (países o clubes) siguen dando lugar a consideración y haciéndose notar.

Pero parece al menos en Sudamérica que esa costumbre de tomárselos casi en broma continúa. Quién va a reparar en que un tal Al Ahly de Egipto está a tres títulos del Real Madrid entre los más ganadores de torneos internacionales. O que otro tal TP Mazembe de la República Democrática del Congo fue un día segundo del mundo (final del Mundial de Clubes 2010 frente al Inter italiano). Que Europa y hasta estha zona miran permanentemente a Africa para nutrirse de talentos, como si ellos no tuvieran en abundancia. Más aún, no es aceptable que una selecciónn de este continente sea candidata en un Mundial. Todavía está el peyorativo «si no son nadie», y esos «nadie» ya demostraron ser alguien.

El fútbol en Africa, como sus riquezas naturales,, está en peligro pero brilla como sus minerales. Crece en un desierto pero brota como pasto bien regado. En palabras de la pelota,, es competitivo, atractivo, ofensivo, talentoso. Y goleador. Y emotivo, vean sus Copas de clubes que se definen muchas veces por poco. Entonces, espectadores del tablón antiguo o ahhora de lo digital, nno lo subestimen más. Tampoco son los números 1. Pero préstenles atención. Porque el fútbol no es de dos continentes, hay otro que se sumó a la lucha hace años.

Diego Martín Yamus