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Tras la desaparición del viejo Glasgow Rangers, la federación escocesa no quiere saber nada con el nuevo club que compró los derechos del nombre del popular equipo, quien por deudas millonarias con el fisco, fue literalmente «borrado».
Pese a las protestas y recursos presentados por la nueva sociedad, quien compró los derechos del uso del nombre del club y parte de las instalaciones del mismo, no solo no podrá utilizar los trofeos del viejo Rangers, sino que tampoco podrá jugar en primera división.
El club Dumferline, quien perdió la categoría esta temporada, pretendió quedarse en primera, pero la federación prefirió ascender al segundo de la segunda división: Dundee FC.
Las airadas protestas de los nuevos accionistas del nuevo Rangers FC y los millones de hinchas que éste posee, no pueden hacer absolutamente nada, ya que este club es considerado «otro».
Ahora, el Rangers, va a tener que empezar de cero por más apelaciones y protestas que hagan sus directivos.
@lostribuneros
