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Las truchadas siguen en la Copa de las Confederaciones y no sólo a Uruguay le pasan cosas malas producto de la pésima organización; México no pudo entrenar porque en la sede que le correspondía no había electricidad.
Medio Tiempo. La falta de alumbrado en la cancha donde estaba programado el entrenamiento de esta tarde, obligó al Tricolor a cambiar la sede donde acudieron sólo los jugadores que no fueron titulares ante Italia.
La comitiva de suplentes partió del hotel de concentración a las 17:10 horas locales a, afortunadamente, una cancha distinta para realizar el entrenamiento a puerta cerrada
La cancha original para hoy se ubicaba en Itaitinga, una localidad fuera de Fortaleza, a aproximadamente una hora de distancia y para la cual habrían debido tomar incluso carretera. Así que al final los seleccionados nacionales terminaron por entrenar en el Estadio de la Universidad de Fortaleza.
Como sucedió cuando el Tri arribó por la mañana a esta ciudad procedente de Río de Janeiro, a la salida para el entrenamiento también hubo decenas de aficionados, tanto brasileños como mexicanos, algunos de estos últimos procedentes de Tamaulipas, que buscaron ver de cerca a los seleccionados.
A su regreso la escena fue similar, al grado que el autobús debió estacionarse en la calle con acceso a la puerta alterna del hotel, cuyo frente da a la playa de Beira Mar, el malecón más concurrido de esta ciudad, la capital del estado de Ceará.
Los elementos que participaron desde el inicio contra la «Azzurra» permanecieron en el hotel para realizar trabajos regenerativos.
La Selección Mexicana entrenará este martes por la tarde en el Estadio Castelao, para reconocer la cancha donde el miércoles enfrentará a Brasil en su segundo partido del Grupo B de la Copa Confederaciones, vital si quiere mantener la esperanza de avanzar a Semifinales.
Fuente: MedioTiempo.com
