El brasileño Neymar demostró la garra sudamericana y la calidad brasileña en la cancha. Su gran performance llevó a su equipo a dar vuelta un partido que estaba prácticamente perdido; 90′ y caían con Atalanta y quedaban afuera de la Champions League, pero el brasileño se conectó con el recién ingresado Mbappé y lograron lo que parecía imposible que fue anotar en los descuentos y darlo vuelta.
En el partido jugado en la cancha del Sport Lisboa e Benfica, el ex Santos, ganó 22 de los 33 duelos, hizo 16 dribles, entregó 44 veces bien el balón sobre 59 (75% de acierto), fue motor de cinco ocasiones claras, hizo una asistencia que terminó en uno de los goles; dos veces se lo perdió.
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